Una obra perfecta y repleta de sinceridad, sensibilidad . Bien contada, honesta, entretenida y llena de ternura. Magistral., 24 de noviembre de 2013
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Esta opinión es de: LAS LEYES DE HERMÓGENES (Versión Kindle)
La primera sensación que me deja "Las leyes de Hermógenes" es de cercanía. Quizá porque el autor es de mi generación o porque viví cosas parecidas en aquellos años. La música, los juegos, la forma de disfrutar que tenían los chicos, la educación de los padres y el vocabulario, llegan a mi corazón y abren la puerta del pasado con fuerza y sin pedir permiso. Cada línea leída era un pensamiento comparable, cada sentimiento era un sentir que había sentido, cada situación algo que podía recordar.Escrita, contada y desarrollada de una forma impecable, "Las leyes de Hermógenes" se caracteriza por ser una obra mayor con un guión que se construye sin aspavientos, sin enredos ni temas farragosos. Sin embargo, el autor muestra con una maestría genuina, cómo hacer que una historia que aparentemente parece rutinaria y vista, se convierta en todo un gigantesco mandamiento de sensaciones y sentimientos a través de personajes muy distintos y variopintos, que finalmente desembocan todos en el mismo puerto: El amor. Porque en el amor cabe el perdón, el arrepentimiento, el humor, la frialdad, la inocencia, el sexo, la educación y por supuesto , ese viejo llamado Hermógenes. "Las leyes de Hermógenes debería ser una asignatura en los colegios para esos chicos de hoy en día.... Y para los adultos que hemos olvidado qué es lo importante de esta vida.
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